Arroz integral de otoño con castañas y azukis

Como presentación de la receta pon simplemente: Aprende a hacer una receta fantástica que te aportará todo el dulzor natural que necesitas en Otoño e Invierno. Rápida, fácil, deliciosa y ¡sanísima!

INGREDIENTES:

  • 1 taza de arroz integral lavado en varias aguas y tostado en una sartén
  • ½ taza de azukis hokkaido* lavados y tostados en una sartén.
  • 1 puñado de castañas, peladas**.
  • 2 tazas de agua de manantial o filtrada.
  • Sal marina sin refinar

*Remojadas unas horas estarán más tiernas. Aunque tostándolas en una sartén se puede conseguir un efecto parecido. Usa siempre azukis hokkaido. Si no, hay que remojarlas toda la noche.

**Para pelar las castañas hazles un corte en un extremo y saltéalas en una sartén con un fondo de agua, hasta que la cáscara se retire un poco (10 minuntos). Después ya las podrás pelar.

PREPARACIÓN:

  1. Ponemos el arroz junto con los azukis y las castañas peladas en una olla a presión

  2. Añadimos el agua poco a poco y llevamos a ebullición.
  3. Añadimos una pizca de sal.
  4. Cerramos la olla y cuando suba la válvula bajamos el fuego al mínimo. Intercalamos un difusor de calor y cocinamos 45 minutos a fuego mínimo.
  5. Después abrir la olla y servir caliente.
  6. Podemos espolvorear un poco de gomasio por encima.

Ya se acerca esa época entrañable del año, y todo huele a invierno.

Llegas a casa sin tiempo y tienes que comer algo. Estás cansado y no se te ocurre nada. Pero no quieres sacrificar la salud por este estilo de vida alocado que llevamos. Te propongo algo: un plato lleno de dulce natural, ahora que llega el invierno, para relajar los órganos y las emociones. Te presento esta gran combinación: arroz, azukis y castañas. Este plato nos aporta grandísimos beneficios, por un lado tenemos las proteínas de alto valor biológico (que conseguimos al combinar legumbre con cereal) y los carbohidratos complejos que aportan energía lenta y que no estresan los órganos. Las azukis son de las pocas legumbres cuya metabolización deja un resultado más alcalino en la sangre. Combina de manera genial con el arroz y además las castañas tienen ese sabor a navidad que… mmmm… ¿a quién no le trae hermosos recuerdos de la infancia? Yo personalmente no concibo estas fiestas sin las típicas castañas a la brasa, y… ¡qué recuerdos! Ese repentino calorcito en las manos entumecidas por el frío…

Espero que disfrutes de este plato tanto como yo. Recuerda que en invierno queremos protegernos del frío y queremos comer cosas que nos nutran y protejan sobre todo los riñones. Las azukis son lo mejor para eso, precisamente. Nutre tus riñones y nutrirás tu felicidad, porque ahí es donde reside nuestra esencia, según la sabiduría oriental.

¡Que la disfrutéis!